Los programas de intercambio permiten a los estudiantes estudiar en una institución diferente como parte de su carrera. Normalmente, los estudiantes aprovechan esta oportunidad para estudiar en el extranjero en un centro asociado de su institución de origen, aunque a veces los programas de intercambio pueden tener lugar en el mismo país. En cualquier caso, estos programas son una forma fantástica para que los estudiantes amplíen sus horizontes, tomen cursos específicos en otra institución y estudien en el extranjero sin comprometerse a vivir varios años en otro país.

Entonces, ¿cómo encontrar el programa de intercambio que mejor se adapte a usted? Puede ser una decisión difícil y que debe meditar adecuadamente, así que siga leyendo para conocer los mejores consejos de INOMICS que le ayudarán a encontrar el programa de intercambio ideal hecho a su medida.

Ubicación, ubicación, ubicación

Una de las cuestiones más importantes que hay que tener en cuenta a la hora de considerar un programa de intercambio es, obviamente, dónde le gustaría alojarse. Debe tener en cuenta no sólo el país que le gustaría visitar, sino también la ciudad o región concreta (e incluso diferentes regiones de su país de origen).

¿Le gustan las ciudades grandes y bulliciosas? ¿O prefiere un pueblo pequeño o algún lugar en el campo? ¿Le gustaría estar en un lugar cosmopolita, rodeado de gente de todo el mundo, o preferiría estar en un lugar más homogéneo con una fuerte cultura compartida? El área que rodea a la universidad de su elección afectará en gran medida a su experiencia estudiando allí, así que asegúrese de investigar la región para saber en qué se está metiendo.

Naturalmente, también debe considerar el idioma. Probablemente no tendrá tiempo de aprender una lengua extranjera completamente nueva antes de su intercambio semestral previsto, a menos, por supuesto, que lo planifique con suficiente antelación como para tomar cursos de idiomas uno o dos años antes. Esta podría ser una forma fantástica de afianzar esos conocimientos y ayudarle a sacar el máximo partido a su carrera.

Pero tenga en cuenta que las universidades extranjeras no sólo ofrecen clases en el idioma local. Por ejemplo, es posible que pueda estudiar totalmente en inglés durante un semestre de intercambio mientras esté en un país extranjero como Francia, Brasil o muchos otros. Asegúrese de explorar las opciones que tiene con sus conocimientos lingüísticos actuales incluso en otros países, puede que se sorprenda gratamente con las opciones.

Naturalmente, si el idioma sigue siendo una preocupación para usted, vale la pena considerar un programa de intercambio que tenga lugar en un país con la misma lengua materna, o incluso dentro de su país de origen. El programa de Intercambio Nacional de Estudiantes en Norteamérica, por ejemplo, ofrece programas de estudios en Estados Unidos y Canadá, lo que potencialmente le permite obtener los beneficios de una perspectiva diferente en sus estudios, pero sin los retos culturales y lingüísticos de vivir en otro país.

¿Cuándo y por cuánto tiempo ir?

La siguiente cuestión importante que debe considerar es la duración del intercambio. Los programas de corta duración suelen ser de unas semanas a tres meses, a menudo durante las vacaciones de verano. Le permiten vivir las experiencias de estudiar en el extranjero (o simplemente más lejos de casa), sin interrumpir ni cambiar la programación de su aprendizaje habitual.

Estos programas rara vez incluyen una carga lectiva completa en comparación con un semestre normal, sino que se centran de forma intensiva en un puñado más reducido de clases. Sin embargo, ¡no dé por sentado que un programa de corta duración de este tipo será fácil o no requerirá ningún trabajo! A menudo, los programas de corta duración son los más intensivos en estudios, ya que hay que comprimir todos los materiales en un menor número de horas.

Aunque puede resultar menos intimidante dado el menor tiempo que pasará fuera, un viaje de corta duración también puede tener sus inconvenientes. Inevitablemente, dispondrá de menos tiempo para asentarse y, a menudo, justo cuando siente que se ha acostumbrado al nuevo entorno, el viaje termina y le envían de vuelta a casa. Además, es menos probable que un viaje de corta duración se convierta en una piedra angular de su experiencia vital como podría serlo un viaje más largo.

Un intercambio de larga duración, por otra parte, suele durar de seis meses a un año o más, y puede incluir clases en una universidad local que formen parte de su carrera en su institución de origen. Por lo tanto, con una planificación suficiente no aumentará su número total de semestres. Esto significa que obtendrá la verdadera experiencia local de asistir a la universidad en su país de acogida y obtendrá una perspectiva diferente de su asignatura.

Un intercambio de esta duración puede ayudarle a experimentar más plenamente una nueva parte de su país o una cultura extranjera. Puede permitirle desarrollar nuevas destrezas lingüísticas, estudiar su campo bajo la dirección de expertos con una perspectiva diferente, o con fortalezas distintas a las del profesorado de su institución de origen, y ayudarle a establecer contactos con colegas de todo el mundo. Y, un intercambio de larga duración en el extranjero le permite sumergirse de lleno en una nueva cultura y experimentar lo que es estudiar en el extranjero, a la vez que recibe apoyo en temas como los visados y la búsqueda de alojamiento por parte de su institución de origen.

Pero los intercambios más largos también tienen sus inconvenientes. Un año puede ser un periodo muy largo en el que un estudiante universitario, en particular, podría perderse la vida social en su universidad de origen, que posiblemente sean algunos de los años más formativos de su vida adulta. Por no hablar de la familia, los amigos y las tradiciones que se pueden dejar atrás durante un tiempo. Además, estudiar de intercambio durante mucho tiempo puede poner a prueba su camino hacia la graduación si no tiene cuidado, incluso si es en una universidad asociada a su universidad de origen, como por ejemplo si necesita ponerse al día con los exámenes o las asignaturas cuando regrese.

Planificación de los Estudios

Los programas de intercambio no suelen ser una parte esencial de la experiencia de licenciatura a la que usted se inscribió originalmente. Normalmente no se tienen en cuenta cuando los responsables universitarios diseñan los planes de estudios y programan las clases. Por lo tanto, merece la pena ser cuidadoso desde el punto de vista académico al considerar un programa de intercambio.

A la hora de elegir un programa, puede resultar emocionante volar al destino más lujoso disponible. Pero, debe ser consciente de cómo se transferirán los créditos y lo que significará para el resto de su licenciatura. Los programas de intercambio probablemente ofrezcan una selección limitada de cursos que su universidad de origen aceptará como parte de su programa de titulación, y puede que tengan requisitos previos. Asegúrese de que cumple los requisitos para los cursos que pretende tomar mientras está de intercambio. Lo último que quiere es que su programa de intercambio le impida graduarse a tiempo.

Además, sobre todo cuando se estudia en el extranjero, es probable que el contenido de las clases con el mismo nombre difiera. Para asegurarse de no perderse ningún tema fundamental, debería estudiar los programas de estudios del curso de su institución de origen y sus opciones en el programa de intercambio para comparar. ¿Hay algún tema importante que se trate en una universidad, pero no en la otra? ¿Falta algún tema en el programa de intercambio? Comprobar los programas de estudios puede asegurarle que no se quede atrás accidentalmente con respecto a sus colegas en casa.

Existe la posibilidad de que sea la primera persona de su universidad de origen en tomar una clase específica en su institución de acogida mientras está de intercambio. O, incluso, podría ser la primera persona en ir de intercambio a esa universidad en concreto en general. En ambos casos, tendrá que colaborar estrechamente con los responsables administrativos, y posiblemente con los profesores de las clases de cada institución. Prepárese para hacer preguntas de forma proactiva sobre el contenido de los cursos, rellenar los formularios requeridos y argumentar a favor de los créditos de los nuevos cursos que le gustaría que le fueran transferidos.

Hable con otros estudiantes que lo hayan hecho antes

Un recurso importante que es fácil olvidar son aquellos que han ido antes que usted: ¡los antiguos estudiantes de intercambio! A veces, las universidades mantienen una lista de estudiantes que han estudiado antes en el extranjero o han realizado programas de intercambio en determinadas universidades, u organizan una jornada de puertas abiertas o una presentación en la que puede escuchar a los que han estudiado en el extranjero. Alternativamente, los estudiantes que completan un programa de este tipo pueden inscribirse en dicha lista, y podrían estar dispuestos a hablar con usted sobre su experiencia. No tema preguntar por estudiantes que hayan realizado el programa antes que usted: sus consejos serán muy valiosos.

Financiamiento

Por último, es importante que tenga en cuenta cómo pagará los gastos de su programa de intercambio. Tendrá que cubrir sus gastos de viaje, seguro, alojamiento, manutención y, en algunos casos, también la matrícula universitaria.

Por lo general, en los programas de corta duración se espera que usted mismo cubra estos costos. Los programas de larga duración, sin embargo, suelen disponer de becas que cubrirán estos gastos. Asegúrese de consultar los detalles de su programa para conocer los pormenores, ya que los programas que incluyen financiamiento mediante becas suelen tener largos procesos de solicitud. Infórmese pronto sobre ellos para tener la mejor oportunidad posible de conseguir una.

Un programa de intercambio puede ser una parte importante, única y asombrosa de sus estudios universitarios. Esperamos que este artículo le haya servido de inspiración para descubrir qué programa es el más adecuado para usted.