Uno de los mayores y más emocionantes desafíos de la carrera académica de un joven llega con ese primer proyecto de investigación. Ser consciente de lo mucho que supone esa decisión también puede ser bastante estresante. Habiendo tanto que considerar, pensamos que sería más fácil dividir el proceso de tomar una decisión en 6 puntos clave. La consideración de cada uno será la mejor oportunidad posible para dar por seguro que el tema de tu tesis de Máster en economía sea el correcto – tanto para ti personalmente como para tu futura carrera. 

1. Asegúrate de que sea algo en lo que estás interesado 

Sonará obvio, pero absolutamente deberías asegurarte de que el proyecto que elijas sea de tu interés. Si vas a estar trabajando en un proyecto durante meses o incluso más, entonces tiene que ser algo con lo que estés comprometido, y la mejor manera de mantenerse implicado es plantearse una pregunta sobre tu proyecto cuya respuesta quieras responder. Vuelve a pensar sobre las clases a las que has atendido y los libros que has leído, y considera las cuestiones con las cuales lo pasaste bien discutiendo y pensando sobre ellas. Si alguna vez hubo un tema con el cual te cruzaste y sobre el cual querías saber más, pero no tenías el tiempo o los recursos para investigarlo, ésta es tu oportunidad para averiguar más. 

2. Inspírate de los proyectos de estudiantes anteriores

Si no estás seguro de por dónde empezar, o no sabes qué tipo de proyecto sería el adecuado para tu curso, es una gran idea mirar proyectos de estudiantes anteriores. En la mayoría de universidades podrás acceder en la librería a las tesis de estudiantes previos, por lo que deberías tomar ventaja de este recurso. Si bien es cierto que nunca deberías copiar la idea de otro, puedes usarla de inspiración. Por ejemplo, puede ser que alguien haya hecho un proyecto sobre las implicaciones económicas de una política internacional dentro de un país en concreto. Tu proyecto podría observar las implicaciones de esa misma política en un país diferente. O podrías mirar una política parecida en un periodo distinto de la historia. Además, muchos alumnos seguirán teniendo enlaces con tu universidad, por lo que podría ser posible contactar con ellos directamente. Si alguien ha escrito sobre un tema en el cual estés interesado, no dudes en pedirle una reunión para aprovechar sus conocimientos. La mayoría de los académicos que se precian disfrutan de la oportunidad de discutir su propia investigación, por lo que no hay razón por la cual ser tímido. En cualquier caso, siempre es fascinante conocer a aquellos con más experiencia que tú que se han mantenido en el terreno. 

3. Pídele consejo a tus profesores o a tu supervisor

Una vez que tengas una o más ideas sobre el tema de tu proyecto, querrás pedirle consejo a gente que tenga experiencia evaluando proyectos. Lo que no quieres es hacer un montón de trabajo sobre una idea de proyecto, para que mucho después lo único que oigas es que tu supervisor piensa que tu tema no es una buena elección. Haz algo de preparación básica antes de reunirte con un supervisor o un profesor – asegúrate de que entiendes los hechos básicos del subcampo en el cual estás interesado, y de que tienes algunas ideas sobre cuál sería el problema de tu investigación y qué métodos usarías para responderlo– pero asegúrate de recibir opiniones sobre tu idea al principio del proceso. Este consejo también va para el resto del proyecto de investigación. El trabajo de tus supervisores es guiarte, por ellovmantente regularmente en contacto con ellos a lo largo del curso de tu investigación. 

4. Escoge algo original, pero no demasiado apartado 

No querrás hacer el mismo proyecto que haya sido hecho antes por un millón de estudiantes. Ésto no solo no será de tu interés, sino que tampoco será del interés de quien califique tu tesis, y eso está claro que bajará tus notas. Intenta aparecer con un nuevo enfoque o un tema inusual que estudiar. A lo mejor hay algún nuevo tipo de análisis de datos que puedas usar, o una población que no haya sido bien estudiada a la que observar. De todos modos, sé prevenido ante algo muy apartado – no quieres quedarte atascado sin materiales o recursos con los que trabajar. Subrayando lo anterior, definitivamente compara tus ideas más ambiciosas del tema junto a tu supervisor para ayudarte evitando la dificultad de ir un nicho en específico y realmente dejarse caer en la madriguera del conejo.

5. Elige un tema pequeño y específico 

Un consejo general a la hora de proponer el tema de un proyecto o una investigación es pensar a una escala menor. Si no sabes demasiado sobre un tema, a penas apreciarás todas las sutilezas y complejidades que contiene. Puedes llegar a pensar que puedes crear un gran proyecto sobre el impacto de la introducción del Euro en Irlanda, por ejemplo, pero este tema es excesivamente amplio para tratarlo en un proyecto de Máster. Sé más específico, y tu proyecto no será solo más manejable, sino que realmente llegarás a la base de algo. En lugar de simplemente rascar la superficie de un tema más general – que no suele ser muy satisfactorio – serás capaz de llamarte un 'maestro' de una subsección de ello. 

6. Considera un tema interdisciplinario 

Si trabajas en la economía, pero te sientes interesado en otro tema académico, puedes tener la oportunidad de aprender sobre ese campo como parte de tu proyecto de investigación. Podrías considerar un proyecto que tenga relación con algún tema como la historia, la sociología, los negocios, la política, o la psicología, por ejemplo. La ventaja de ésto es que puedes ponerte a prueba aprendiendo información y los métodos de otro campo para ver si estudiándolo más a fondo te interesaría. También te ayudará en crear un proyecto memorable y único, dado que la mayoría de tus compañeros de estudio probablemente estudiarán un tema basado puramente en la economía. Ésto podría dificultar un poco tu proyecto, ya que tendrás que entender más y nueva información en comparación con otros – pero también puede ser muy gratificante para estudiantes ambiciosos y comprometidos.