Si estás pensando en qué dirección tomar para tu carrera de investigación, una posibilidad es hacerse profesor, enseñando e investigando en un contexto universitario. Éste es uno de los trabajos más deseados entre jóvenes académicos, y algo por lo que la gente suele luchar. ¿Pero cuáles son los pros y los contras de trabajar como profesor de universidad?

Los Beneficios de Ser un Profesor de Universidad

Una de las mayores ventajas de trabajar como profesor de universidad es la libertad que te da en cuanto a investigación. Una vez que tengas la experiencia suficiente, podrás elegir en qué proyectos trabajar y podrás escoger las metodologías que pienses que vayan a ser más efectivas. Ganas libertad académica y la posibilidad de decidir qué problemas investigar y cómo trabajar en ellos. Es raro que un trabajo te ofrezca una libertad intelectual como ésta. 

Además, el trabajo de enseñanza e investigación de un profesor es muy interesante, dándote la oportunidad de estar siempre aprendiendo y de ocuparte de problemas altamente estimulantes. Enseñar a los estudiantes y atraer su interés a tu materia es altamente recompensante, permitiéndote dar forma e inspirar la próxima generación de académicos. 

Otra gran ventaja es que las horas de trabajo en el ámbito académico suelen ser más flexibles que en otras profesiones. Por lo tanto, si quieres salir de la oficina pronto para recoger a los niños del colegio, y trabajar luego por la tarde una vez que los niños se hayan dormido, ésto suele ser posible. 

O si quieres tomarte un día sabático, los profesores sénior tienen la posibilidad de organizarse desde unos meses hasta un año lejos de sus obligaciones de enseñanza regulares, para que puedan ir e investigar a un lugar distinto, o sino también pueden alejarse de la enseñanza por un tiempo para trabajar o escribir un libro, por ejemplo. 

Finalmente, cuando estés en tus etapas intermedias de la carrera de camino a ser profesor, encontrarás muchas oportunidades para viajar. Puedes conseguir un trabajo en muchos lugares a lo largo de todo el mundo, y puedes viajar a lugares nuevos para conferencias o hacer visitas de investigación. Si disfrutas explorando lugares nuevos y conociendo nuevas culturas, idiomas, y comidas, entonces trabajar como profesor te ofrece muchas oportunidades. 

Las Partes Negativas de Ser un Profesor de Universidad 

Uno de los mayores problemas con el hecho de ser un profesor de universidad es que dado que hay un gran número de académicos altamente cualificados compitiendo para un pequeño número de trabajos de profesorado, son altamente competitivos. Incluso un investigador talentoso que trabaja duro y que ha publicado extensamente y que tiene experiencia enseñando, puede que jamás llegue a conseguir un trabajo de profesor permanente. 

Ésto da lugar a una seguridad laboral pobre, donde los investigadores que esperan encontrar un papel de profesorado tienen que aceptar una serie de trabajos temporales con contratos que van desde 6 meses hasta unos años. Esta inseguridad es estresante, y significa que tendrás que estar constantemente atento para encontrar y aplicar a nuevos puestos. 

Si exitosamente consigues un trabajo permanente como profesor, también está el problema con el pago del dinero. A los profesores de ningún modo se les paga mal, y normalmente ganan el dinero suficiente para vivir cómodamente y formar una familia. Sin embargo, alguien que tenga el nivel de habilidad y experiencia que un profesor tiene, podría casi ciertamente ganar mucho más dinero en un sector privado. 

Otro problema con el hecho de trabajar como profesor es que las largas horas de trabajo son típicas. Como discutimos antes, las horas tienden a ser flexibles, sin embargo, sigue siendo típicamente de esperar que los profesores vayan a trabajar en las tardes y en los fines de semana. En algunos casos, puede ser incluso difícil para ellos tomarse los días de vacaciones que se han ganado, debido a que simplemente hay muchísimo trabajo para que puedan tomarse tiempo libre. Para permanecer en la línea de la profesión, tendrás que trabajar muchas horas a la semana, y tendrás que sacrificar tiempo para la familia, amigos y hobbies.